Publicado en: RevistaES del Periódico Hoy (6 Mayo 2017)

¿Como pasaron su Semana Santa? ¿Descansaron? ¿Cargaron las baterías? Los aficionados al buen comer no paramos, porque se nos llenó la agenda de actividades interesantísimas.

La primera cita fue en Eden Roc (www.edenroccapcana.com) donde Beto Puerta expuso sus ideas renovadoras de la cocina venezolana en el increíble marco del Blue, en el Caletón de Cap Cana.

Otra de las iniciativas de Stefano Baratelli (el Maître de Maison) y de Gianluca Re Fraschini (el chef ejecutivo) que no descansan para ofrecernos las mejores experiencias del panorama internacional.

En esta ocasión el chef vino desde el Santo Bokado (www.santobokado.com) de Caracas para ofrecer un extenso menú a base de tapas, mini-raciones y pinchos que se comen con las manos. Es su manera de trasladar al pequeño formato toda una gama de sabores tradicionales, reinterpretados bajo su óptica personal. Una propuesta con intención de alejarse de esa cocina demasiado formal, basada en reflexiones e intuiciones espontáneas que seducen por su frescura y riesgo. Aromas de siempre que sirven de inspiración para platos repletos de sabor, expresivos y bien hechos. Porque, a pesar de la complicada situación del país, el chef Puerta no renuncia a luchar por su concepto de cocina, convirtiéndose en la mejor representación de los nuevos aires de la gastronomía venezolana.

Una propuesta actual, de una culinaria muy cercana a la nuestra en ingredientes y preparados. Pues a base de cilantro, melao, plátano maduro, chicharrones, queso blanco, costilla de cerdo y un montón de víveres ofrece combinaciones ingeniosas como el sabroso aperitivo de Caña en Infusión en Cocuy (un licor procedente de la Agave Cocui) o un delicioso Tartar de Atún Rojo en Emulsión de Palmito y Tierra de Casabe.

Beto Puerta demuestra ganas, maneras y una admirable energía propia de su juventud. En su prometedora carrera quizás debe ajustar un poco más la proporciones, organizar la degustación de forma más afín a sus intenciones, refinar algo más los sabores y terminar de depurar unos preparados con enormes posibilidades gastronómicas. Es su camino hacia la elegancia, hacia la alta cocina,

un brillante discurso de quien tiene mucho que decir en el desolado panorama gastronómico venezolano. Le aplaudimos su titánico esfuerzo.