Publicado en: RevistaES del Periódico Hoy (25 de Octubre 2014)
¿Con que tomas el café con leche? No me refiero si con mucha o poca crema, si con azúcar, edulcorante o amargo; la cuestión es si lo acompañas de una doughnut, un muffin, una galleta o un sandwich. Parece mentira, pero ese cotidiano café abre un numeroso abanico de respuestas según a quien y en el momento que preguntes.
Recuerdo una escapada por la América profunda –siendo yo joven- la sorpresa que me causó que la mayoría de fast foods ofrecieran una famosa soda mentolada entre su menú de refrescos, más idónea para un enjuague bucal que como acompañante de la grasienta hamburguesa. Otra escena que no puede dejar de chocarme es la gente capaz de cenar ante la tele con un trozo de pizza y un vaso de leche. No, eso no suena bien.
Entonces ¿cómo mezclamos los sabores? ¿a que se debe que unos alimentos combinen mejor que otros?
La mayoría de aromas y la manera idonea de agruparlos es algo que tenemos plenamente interiorizado y tomamos como algo natural. Típicas combinaciones de pescado y limón, chocolate y café o queso con vino se han transformado en alianzas gustativas compatibles en nuestro cerebro. Factores culturales influyen en nuestro paladar y preferencias, pero tambien nuestro gusto individual, esas predilecciones personales de cada uno.
Pero no es solo eso; en los últimos años investigadores y científicos se han planteado la misma pregunta y, tras numerosos estudios, parece ser que existen ingredientes que comparten moléculas de olor y sabor, por lo cual crean alianzas más armónicas. El chocolate, por ejemplo, comparte propiedades organolépticas con la coliflor, las ostras, el kiwi o el ruibarbo.
El polémico Heston Blumenthal bajo su concepto de “gastronomía total” experimentó sobre estas teorías en su restaurante, con combinaciones tan sorprendentes como el hígado de cerdo con jazmín o el caviar con chocolate.
Hoy propongo que sean intrépidos para afrontar una mezcla inusual; porque vamos a juntar en un mismo preparado camarones, aguacate y vainilla ¿Soprendidos? Seguro que no tanto y si no piensen en que sabores extraños les gusta combinar.
MakinGastronomy 