¿Fidelizar o estar de Moda? Esa es la cuestión

Publicado en: RevistaES del Periódico Hoy (17 agosto 2013)

rest 1Imagínense la escena: parquean su carro frente a un edificio con despampanante fachada de granito negro. Traspasan unas puertas de cristal y entran en un dealer de impecable suelo de marmol, lámparas de Philippe Starck y sillones de Mies van der Rohe. Este concesionario destila lujo y buen gusto pero resulta que, a pesar del espectacular escenario, los carros que vende son de hojalata de la gama más baja, meras imitaciones mal hechas de carros alemanes, japoneses y norteamericanos. Sin motores potentes ni las prestaciones que deberían, realizados con materiales baratos y tecnologías mediocres.

¿Sorprendente verdad? ¿Les ha ocurrido alguna vez? Estoy seguro que en el caso de los carros dificilmente, pero en otros productos quizás si. Si piensan bien verán que es algo que sucede de vez en cuando en el mundo de los restaurantes.

Lamentablemente en el sector de la restauración nos encontramos con locales que priman la escena sobre el producto, olvidando que el principal motivo por el que los clientes acuden a los  restaurantes es para comer y beber. Algunos empresarios se gastan una fortuna en fantásticas decoraciones, vajillas y uniformes, dejando a un segundo plano la elección de las materias primas, la confección del menú o la elaboración de los platos.

rest 2Siendo realistas, una ambientación no fideliza; con la mayor de las suertes crea un fenómeno de “moda” que atrae clientes  -a todo el mundo le gusta estar en el sitio cool– pero no los retiene. Dura lo que tardan en abrir otro lugar con una ambientación más sorprendente, o simplemente aparece otra novedad; pues una moda –por su propia condición- es un fenómeno efímero.

Los restaurantes deben llamar la atención de sus clientes por el producto que ofrecen; deben crear una cocina con un concepto claro, bien fundamentada, fresca y con una impecable elaboración. Así satisfacerán expectativas y les brindarán a su público una experiencia gastronómica que permanecerá anclada en su memoria. Justamente el recuerdo que queremos evocar la próxima vez que tengan que elegir un local para ir a comer.

Hoy les propongo un arroz que vestiremos de blanco con el más salvaje de nuestros productos. Un cremoso risotto de coco, tan simple y original que nos convertiría en fieles clientes de donde lo sirvieran.

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6 pensamientos en “¿Fidelizar o estar de Moda? Esa es la cuestión

  1. Tal vez el único punto es la proliferación en la región de empresarios especuladores que se dedican a crear «conceptos» en los que al gastronomía queda de último, saquean los bolsillos de los clientes fácilmente impresionables y a los 6 u 8 meses, con los bolsillos llenos, venden o cierran camino a armar su próximo disparate.

    Lástima que hay un tipo de cliente que no aprende.

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  2. Ai yo he visto verdaderos ejemplos de eso cuando vivía en Barcelona. Colas y colas de gente para entrar en algún restaurante por todo lo que dices y por qué encima estaba el famosillo de turno comiendo, luego una decepción total.

    Eso ya al criterio de cada uno, hay gente que prefiere la apariencia que la comida buena 🙂

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