Publicado en: Manjar (Diciembre 2018)
Sigue esos preceptos con devoción y tus croquetas serán las divas de los fritos nacionales
1 Darás rienda suelta a la imaginación
Hazlas de lo que quieras pero cuidado con los ingredientes con mucha agua porque licuarán tu bechamel
2 Renegarás de los crudos
El ingrediente que elijas pícalo bien fino y cuécelo bien
3 Seguirás la ortodoxia de los clásicos
Pues un buen roux será la base de una cremosa bechamel
4 Huirás de lo light
Utiliza leche entera para que queden bien sabrosas
5 Inyectarás un bombazo de sustancia
Sustituyendo una cuarta parte de leche por nata líquida
6 Rendirás culto a las tisanas
Infusiona la leche con huesos de jamón, tocineta o alguna fina hierba y ganarás sutileza
7 Sacralizarás el descanso
Una vez empanizadas las dejarás reposar en frío para que al freírlas formen costra y no estallen
8 Las vestirás finamente
Utiliza el pan rallado estrictamente necesario para conseguir un empanizado lo más delicado posible
9 Las someterás a un baño de calor
Sumergiéndolas en aceite a 375ºF, a poder ser de oliva
10 Las freirás en petit comité
Por tandas de pequeños grupos para no bajar mucho la temperatura del aceite