Publicado en: Santo Domingo Times (febrero 2015)
Hubo una época en que la República Dominicana era una tierra dulce, muy dulce. No solo porque nuestra forma de hablar era suave y almibarada o porque en la cara del isleño nunca faltaba una sonrisa; sino porque se cultivaba tanta caña, se producía tanto guarapo, que el aroma a melaza impregnaba todo el país.
No quedó alternativa, cuando se terminó el oro y los ojos de los españoles se fijaron en la conquista del continente, aquí empezamos a cultivar caña. Esa mata endémica de Nueva Guinea, que pasó por India y China hasta llegar a la Península Arábiga (donde fue bautizada como “as-sukkar”) era un bien muy codiciado.
Con toda una aureola de beneficios y un uso casi medicinal, no lograba crecer en el viejo continente, pero encontró en nuestro clima un lugar para ser feliz, y eso –en aquellos tiempos- valía mucho. Tanto que al azúcar se lo llamó “oro blanco” y se convirtió en un lujo que solo los más ricos podían comprar y consumir.
En el Caribe la caña crecía con facilidad y las grandes plantaciones proporcionaban a ingenios y trapiches el material para convertir Europa en un continente más dulce. Es esa transformación de la caña, esa industria del azúcar que tan arraigada tenemos, la que ha dado a la gastronomía dominicana un elemento de inconmensurable valor: los fantásticos dulces, antojos y golosinas.
Raspaduras, lactomarós, frutas cristalizadas, casquitos de guayaba, jalaos, suspiros, alfajores, gofios y muchos pastelitos a base de coco pueblan nuestras dulcerías con una característica común: son preparados sencillos, con pocos y accesibles ingredientes, y transformados -por manos sabias- en golosas delicias.
Hoy nuestro ranking rinde homenaje a la tradición de un pueblo azucarero, al caldero de melao cociendo en el fuego y a la cara más dulce de la culinaria criolla.
Empezamos nuestro ranking con el dulce más representativo de la riqueza ganadera dominicana.
El concón es la versión espesa del famosísimo dulce de leche, esa crema de untar tan extendida por todas las regiones sudamericanas. La diferencia es que el nuestro es sólido, se corta en forma de bloques y ofrece múltiples variantes (con coco, guayaba, piña, cajuil o naranja).
Por su sabor cálido y tostado es aliado perfecto del café, el chocolate y los frutos secos.
Desciende de los afamados turrones de origen árabe-medieval que llegaron a la Península Ibérica en el siglo XV y pronto se convirtieron en el postre más típico de navidad.
A diferencia del guirlache español, el nougat francés o la halva israelí (realizada también con ajonjolí), el dulce criollo cambió la miel por el azúcar al cruzar el charco. Ya en Quisqueya traspasó tiempos y momentos, convirtiéndose en una golosina que el dominicano devora en cualquier ocasión.
3 – Canquiñas blancas o Palitos de Coco (para los capitaleños)
Por las calles de la capital oí en una ocasión vocear a un tiguere “canquiña latigosa, si no la chupa no la goza”. Cuanta razón tenía en lo de gozar, no se ha inventado un dulce tan básico y delicioso.
Con solo dos ingredientes (leche de coco y azúcar crema) se salpica con gotas de limón y algo de vainilla para aromatizar. El secreto de su apetecible color blanquecino se encuentra en el jalao, el gesto de estirar repetidamente la masa colgada y tibia hasta que clarea.
Pariente de las cocadas, los jalaos o los piñonates, es la golosina de trapiche por antonomasia. Su elaboración ancestral ligada al subproducto de la caña le otorga un lugar especial en nuestra tradición gastronómica.
Es intenso y complejo, cálido y energizante. Como la melaza y el cajuil, sus únicos dos componentes que se ensamblan en un todo.
Por lo delicioso que es y por estar ligado a lo más puro de la historia dominicana merece la segunda posición.
Es la versión criolla de las paletas, piruletas, lollipops o bolones que levantan las pasiones de cualquier niño. Imprescindible en todo cumpleaños de antaño, su forma y sabor nos traslada a la infancia con la mágica particularidad de hacernos sonreír.
Por ser el dulce más dulce, el más deliciosamente simple, el que puedes encontrar en cualquier esquina, semáforo o colmado y el que tiene más carga afectiva, se merece el coronar nuestro más goloso ranking.
* Puedes encontrar casi todas las recetas de estos deliciosos dulces en el blog de mi estimada Clara www.cocinadominicana.com
** Photo Shot by Anita por el Mundo
Excelente entrada. Nuestros más sabrosos dulces!
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Marilyn gracias!! Como bien sabes faltan muchos igual de buenísimos.
Beso grande
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Gracias por este post dulce. Los desconocía !!!
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Gracias a ti por el comentario. Que bueno que te gustara!!
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Me has tenido hipnotizada hasta el final… que ganitas de probarlos todos!!!!
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Ligia, te mando un paquetico surtido? hehehe
Un beso grande
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si si si!!!! jajajajaja
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Una delicia tras otra…
Un abrazo y buen fin de semana. Aquileana ⭐
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Aquileana …. gracias!! La verdad es que son muy ricos. El delirio de cualquier goloso.
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Me ha encantado el post! Muy interesante la historia, gracias por compartirlo y los postres tienen un pintón!! ;p
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Graaaacias, es parte de la República Dominicana y sus dulces tradicionales.
Los postres estás algo customizados …. hehehe
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Que hambre me ha entrado !! Muy interesante el post Kiko. Gracias 😉 Besitos
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Anna, gracias a ti. Me alegro que te gustase.
Un beso
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😉
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¡No conocía esta parte de la gastronomía Dominicana! Ahora tengo ganas de volver y probarlos todos…
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Gracias Jacqueline, no ves ya tienes buena excusa para regresar, tumbarte bajo un cocotero y probar los fantásticos dulces.
Un abrazo
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¡Todo se ve increíble! ¡Además tus reviews los hacen más apetitosos! Gran trabajo Kiko.
Un abrazo. Espero verte en algún comentario en MY BLACK MIRROR 🙂
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Graaaaaacias Enrique.
Que no lo comente no quiere decir que no lo lea …. hehehe; el tuyo es un blog excelente.
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Lo se lo se… Sos unos de mis más fieles lectores Kiko! 😀 El tuyo es un graaan blog, eso se refleja en la cantidad de seguidores y me gusta… a seguir así! 😉
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Gracias por tu ánimo!! Feliz SS
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me gustan cada unas de esas tentaciones – mega post Kiko
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Epaaa ….. gracias!! No están mal para tomarlas en alguno de los yates que publicas (entre chapuzón y chapuzón) hehehe
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buena idea Kiko!!!
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Todos muy apetecibles, yo también quiero un paquetito como el de Ligia! ji,ji
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Que marche dos, entonces!! hehehe
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Wow!! definitivamente me quedo con el numero 5 Concón de Leche lo amo se ve super delicioso y hablando y hablando adonde puedo yo conseguir deleitar mi paladar con esa delicia….. Como amo los ricos dulce de mi pais.
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Teresa, tu eres una fan del concón de leche….. hehehe
Lo cierto es que es un dulce delicioso.
Un abrazo
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Pero Kiko no me contestate mi pregunta. A donde puedo adquirir(comprar el el numero 5) hehehehe Porfaa!!!!! que se ve super delicioso y un abrazo para ti tambien!
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Bueno, el concón de leche yo diría que lo puedes encontrar en cualquier dulcería del país. Este está un poco customizado….hehehe, pero el básico está en cualquier parte.
Si te animas también lo puedes hacer tu. Es un poco laborioso, pero no es difícil.
Abrazo
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